Con el equipo descansado tras la suspensión del encuentro liguero y con la obligación de borrar la mala imagen del clásico, Ancelotti se olvidará de las rotaciones en el once ante el Milan. El técnico italiano apostará por los habituales y repetirá de nuevo el esquema que parece que será el habitual en lo que resta de temporada, aunque de momento no da los resultados esperados. Con el regreso de Rudiger y Rodrygo, todos estarán disponibles salvo Courtois y los ya conocidos de larga duración.
El Real Madrid quiere evitarse cualquier mínimo susto. A pesar de lo dura que ha sido la previa del encuentro, Ancelotti sabe de la trascendencia del encuentro y de lo mucho que se juega el equipo, tanto a nivel clasificatorio como casi más importante, de imagen. El clásico sigue aún coleando y tanto cuerpo técnico como jugadores quieren olvidarlo cuanto antes. Se acabaron los experimentos y Ancelotti irá con todos los aparentemente titulares. Quizá la única novedad puede estar en la entrada de Modric, aunque todo apunta a que Camavinga será el cuarto que acompañe a los tres titulares habituales del centro del campo.
Repite el 4-4-2
Ancelotti, a pesar de los complicados momentos a nivel de juego y ya, de resultados, sigue convencido que la clave del éxito es el esquema con cuatro en el centro del campo y con Vinicius y Mbappé en la punta del ataque. El técnico italiano tiene olvidado lo del clásico y por ello seguirá insistiendo para dar con la tecla para alcanzar un buen nivel de juego. La primera prueba para redimirse, un Milan que quiere resarcirse en un escenario tan imponente como el Santiago Bernabéu.
La única ausencia volverá a estar en la portería. Courtois, el único que no se ha recuperado de su lesión y se perderá el encuentro. Lunin repetirá en la portería en una noche en la que buscará olvidar los fantasmas de la noche del clásico. Quizá sea la última oportunidad (si no vuelve a lesionarse Courtois) que tenga Lunin en el Real Madrid. La defensa volverá a ser la habitual. Con Lucas, en el punto de mira tras el clásico, acompañando a Militao y Rudiger, que finalmente si estará tras recuperarse de la sobrecarga muscular que sufrió en su pierna izquierda. Mendy acompañará en la banda izquierda.
En el centro del campo aparece la única aunque mínima duda. Tchouameni parece fijo, al igual que Valverde y Bellingham. El acompañante de estos tres será el otro francés. Camavinga, al igual que ocurrió ante el Barcelona, repetirá en la titularidad por delante de Modric, siendo esta la única variante del once de Carlo Ancelotti.
La delantera será la habitual. Y esta vez, sin Vinicius volcado, aparentemente a la banda. El brasileño y Mbappé repetirán de nuevo como pareja atacante del equipo blanco. El brasileño, aún tocado tras lo sucedido con el Balón de Oro, recibirá de su afición todo el cariño que se le ha negado en los últimos días. Mismo apoyo que tendrá el francés. Tras la nefasta noche del clásico, donde cayó hasta ocho veces en fuera de juego, el Benabéu le brindará todo el apoyo a un jugador que sigue en busca de encontrar el nivel tan esperado de uno de los mejores jugadores del mundo.
Rodrygo esperará en el banquillo
A pesar de que finalmente ha entrado en la convocatoria, Rodrygo tendrá que esperar su turno en el banquillo. Aún con la falta de ritmo necesaria, tendrá esos minutos pero en la segunda mitad. Tan solo dos semanas después de su lesión, de nuevo otra recuperación milagrosa ha permitido al Real Madrid tener de nuevo disponible a Rodrygo solo trece días después de su lesión.
Posible once del Real Madrid
Lunin, Lucas Vázquez, Militao, Rudiger, Mendy; Tchouameni, Camavinga, Valverde, Bellingham; Vinicius y Mbappé.