Definitivamente, Ceballos se ha subido al tren del Real Madrid. Casi desamparado durante los últimos tiempos de blanco, los últimos acontecimientos ocurridos durante los primeros meses de la temporada le crearon una oportunidad a Dani que esta vez sí, parece que ha aprovechado. Unas veces por cabezonería de Ancelotti y otras por falta de motivación del propio Ceballos, pero lo cierto es que nunca se ha terminado de consagrar como uno de los importantes del técnico italiano. De hecho, el propio centrocampista llegó por momentos a rendirse como ya pasó en el último día de mercado, cuando él mismo pidió volver al Real Betis. Sin embargo, nadie se podía imaginar que la negativa del club a dejarle escapar, le daría con el paso de los meses, la oportunidad que tantos años llevaba esperando.
Ceballos es el timón
Si este Real Madrid ha evolucionado en el juego, es gracias a Dani. Desde que el utrerano se ha convertido en un jugador importante, la mejoría en el juego del equipo ha sido más que notable. Cuando él está sobre el terreno de juego, los de Ancelotti saben a lo que juega. De hecho, ante el Valladolid fue el claro ejemplo de la importancia que tiene en el campo. La situación ha cambiado tanto que ver jugar a Ceballos se ha convertido, no solo en una satisfacción por el buen trabajo que hace, si no incluso algo de nostalgia. Esa que genera cuando sus datos recuerdan a los de una leyenda tan añorada con es Toni Kroos.
Sus números en el último encuentro rozan prácticamente la perfección, algo a lo que no están muy acostumbrados en la casa blanca desde la retirada del alemán. 98% de efectividad en el pase ante el Valladolid. 117 de 119 pases intentados, 3 de ellos, claves en la creación de las oportunidades más claras de los blancos. Unos números brillantes. Su nivel fue tan alto que únicamente perdió cuatro balones en los 70 minutos que estuvo sobre el Nuevo José Zorrilla.
Pero su importancia en el juego no es solo por lo que crea con la pelota, si no por todo lo que da sin ella. Sacrificado en ataque, pero sobre todo en defensa. Su presencia en el medio a la hora de defender permitió al equipo sufrir menos cuando el Valladolid se asomó por el área de Courtois.
«He esperado mi momento y quiero seguir trabajando”
El cambio de actitud del sevillano es evidente. Su rol ha cambiado drásticamente durante los últimos meses y ahora mismo, no hay quien le quite las ganas a Ceballos de seguir luchando por un hueco en las noches grandes del Real Madrid esta temporada. Preguntado por ello, el propio Ancelotti ya no lo descarta: «No es que en los partidos importantes tenga que quitar a uno de arriba, sino que él puede ser titular, también con esta delantera. ¿Por qué no?».
Su suplencia ante el Barcelona en la final de la Supercopa de España fue su último encuentro que empezó desde el banquillo. Tras una dramática primera parte ante los azulgranas, el ex del Real Betis entró en el minuto 45. A partir de ahí, se ha convertido en inamovible. Y lo cierto es que sus números a nivel de goles y asistencias no reflejan la transcendencia que tiene en el juego.
El derbi, en el horizonte para Ceballos
Será el «día D». En sólo 10 días saldremos de dudas con el rol definitivo de Dani Ceballos. Será la próxima gran prueba de este Real Madrid que sin duda está en alza. Si ese día es titular, ante el Atlético de Madrid, todo lo que ha hecho hasta ahora, habrá dado sus frutos. Para ese día, toca esperar, pero de momento, lo cierto es que a este nivel no hay quien mueva a Ceballos.