Carlo Ancelotti sigue acumulando premios. El de Reggiolo, que ya ganó la condecoración a mejor entrenador del año en el Balón de Oro y en el The Best, ha vuelto a tocar metal. Esta vez, ha sido premiado por la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) como mejor entrenador italiano de la temporada pasada, la 2023/2024. Carletto se alzó con el «Panchina d’Oro» (Banquillo de Oro), un reconocimiento de enjundia, pues son los propios compañeros de profesión quienes lo eligen. Ancelotti, que ganó en las campañas de 2003 y 2004 el de mejor entrenador del curso en la Serie A (premio que actualmente ostenta Simone Inzaghi) y recibió también una «Panchina d’Oro Speciale» en 2018, ha vuelto a salir premiado en su país natal.
Una temporada gloriosa
Este galardón es el broche a un año dorado para el técnico italiano. La temporada 2023/2024 fue de ensueño no solo para el propio Carlo sino para todo el madridismo. Pese a las ausencias destacadas de Thibaut Courtois, Militao y Alaba y la marcha de Karim Benzema, Ancelotti logró crear un bloque sin fisuras que levantó la Decimoquinta Copa de Europa, la 36ª Liga y la 13ª Supercopa de España del club. Además lo hizo con una superioridad total, el equipo tan solo perdió dos partidos en toda la temporada (uno en Liga y otro en Copa del Rey, ambos ante el Atlético de Madrid).
Ancelotti demostró, a pesar de las dificultades, que era un entrenador más que capacitado para colmar de éxitos al Real Madrid y se reivindicó con respecto a los que creían que su tiempo ya había pasado. Si bien es cierto que la 22/23 no fue la mejor campaña (solo se logró el título de Copa), Carletto dio la vuelta a la situación y calló a todos sus detractores.
Ancelotti defiende su forma de trabajar
El transalpino dedicó unas palabras tras recoger el galardón y declaró que el Real Madrid no está anclado a ninguna forma de juego en concreto: «Es muy emocionante estar aquí, muy emocionante. El tema es el fútbol del Real Madrid. No tiene una identidad concreta, es flexible. Intentamos adaptarnos a los distintos rivales y a las diferentes situaciones dentro del partido».
«Nuestro trabajo, el mío y el de mi cuerpo técnico, es intentar focalizar a los jugadores. Su actitud, su sacrificio, su concentración… Creo que en el trato entre personas uno tiene que ser quien es. Todos dicen: ‘Es cuestión de ser un buen gestor, de gestionar bien’. Sí, pero no es algo que haya tenido que estudiar. Es como soy y siempre seré así», afirmó Ancelotti explicando su forma de trabajar y como eso le ha dado sus frutos.
A engrosar su leyenda
Los tres títulos (Champions, Liga y Supercopa de España) del curso pasado, dejaron a Ancelotti a las puertas de convertirse en el entrenador con más títulos en la historia del Real Madrid. Ese logro ya lo ha conseguido esta temporada y tras los triunfos en la Supercopa de Europa (contra el Atalanta) y en la Intercontinental ante Pachuca se ha situado en solitario en el Olimpo del banquillo madridista. Con 15 entorchados ha superado los 14 de Miguel Muñoz y ha abierto hueco con los 11 de Zidane.
Pero el de Reggiolo no quiere parar aquí. Inmerso en la 2024/2025, se muestra ilusionado y con esperanzas de lograr algo histórico. El Real Madrid nunca ha conseguido el triplete en una misma temporada y en este curso las opciones de conquistarlo siguen intactas. Ancelotti así lo recordó antes del parón internacional: «A pesar de todas las dificultades, llegamos a marzo peleando en las tres competiciones más importantes: Champions, Liga y Copa. Estamos ahí, luchando. Y esto no había pasado en los últimos tres años».
