Endrick y Valverde clasifican al Real Madrid tras una noche agónica. Un gran Mbappé y un tanto de Vinicius pusieron por delante al equipo blanco en lo que parecía una noche plácida. Sin embargo, los errores de Camavinga y Asencio dieron vida al Celta que mandó el partido a la prórroga. Con el estado de emergencia activado en el Santiago Bernabéu, un decisivo Endrick con un doblete dio vida al Madrid y a Ancelotti. Valverde sentenció el encuentro con un golazo.
Pitos
El Bernabéu se pronunció. La Supercopa de España ha hecho mucho daño entre la afición blanca que no dudó en levantar el sonido de viento nada más salir a calentar los jugadores. Sin embargo, unos pitos que en un principio parecían ser generalizados y que con el inicio del partido tomaron un protagonista en concreto: Aurelien Tchouameni. El francés, principal señalado por la parroquia blanca.
Con todo este panorama, el equipo blanco salió en busca de la clasificación para los cuartos de final. Sin embargo, esa reprimenda no sirvió de entrada. El equipo de Ancelotti no se encontró a gusto durante los primeros minutos del partido sobre todo por culpa de un Celta muy cómodo con el balón. De hecho, los vigueses gozaron de la mejor oportunidad con un remate de Starfelt que acabó estrellándose en la cruceta. Tras esa llegada, el Real Madrid reaccionó. Varios remates de Tchouameni, Modric y sobre todo Brahim, comenzaron a poner en tensión a Iván Villar.
La jugada
De lo que pudo ser, a lo que acabó siendo. En el minuto 37 todo cambió. Una internada en el área del Real Madrid acabó con Swedberg pidiendo un posible penalti tras una salida en falso de Lunin. Sin embargo, Munuera Montero no señaló nada. Para más inri, la jugada continuó. Lucas sacó el balón rápidamente para armar el contrataque. La pelota le llegó en el medio a Mbappé y a partir de ahí el francés hizo el resto. Kylian arrancó con potencia para marcharse de varios jugadores vigueses, entre ellos, Javi Rodríguez, que tras zafarse del él armó su pierna izquierda para batir a Iván Villar. La polémica estaba servida. Sin embargo, el VAR reafirmó la decisión de Munuera para validar el primer tanto. Tras este gol, el Madrid se liberó.
Conexión letal
La segunda parte fue otro cantar, sobre todo tras la reanudación. El equipo de Ancelotti disfruta con espacios y así lo volvió a demostrar. Con un Celta más volcado en tareas ofensivas, los blancos no dudaron en castigar como mejor saben, al contraataque. Una gran jugada colectiva entre el tridente puso más distancia en el marcador. Un balón en profundidad de Mbappé inició la jugada del segundo tanto. Su balón le llegó a Brahim que tras estar habilitado por el defensor, asistió a Vinicius para que este batiese al portero celeste. Sin dudar, el brasileño mandó el balón a guardar y dejó lo que parecía en ese momento la eliminatoria prácticamente vista para sentencia.
Ya con el 2-0, el conjunto madrileño gozó de varias oportunidades para aumentar la diferencia, sobre todo en las botas y cabeza de Mbappé. Sin embargo, estuvo desafortunado. Por su parte, el equipo de Giráldez disfrutó de varias oportunidades para recortar distancias aunque dos grandes intervenciones de Lunin lo evitaron.
Ya en los minutos finales y con los cambios ya hechos, Güler tuvo en sus botas el tercero. De hecho, lo consiguió. Pero un fuera de juego previo de Vinicius volvió a meter al Celta en la eliminatoria. Y vaya que si se metió.
10 minutos catastróficos
Cuando todo apuntaba a un final plácido, Camavinga dio alas al Celta. Un error en la salida inició el fin de la tranquilidad. Un mal pase de Camavinga al borde del área propició el robo del equipo de Giráldez. El balón le llegó a Pablo Durán que tras ponerle la pelota en bandeja a Bamba, este no perdonó. El gol del costamarfileño hizo saltar las alarmas. Aunque lo peor estaba por llegar.
Otro error (el enésimo del Real Madrid en defensa), esta vez de Asencio terminó por poner en jaque la eliminatoria. Un penalti de novato cometido por Asencio mandó al punto de penalti a Marcos Alonso, que sin demasiadas dificultades batió a Lunin. Un empate que terminó de activar el estado de emergencia. Lo que por momentos pudo parecer una victoria sencilla acabó convirtiéndose en un drama.
Los olvidados de Ancelotti
Estas cosas tiene el fútbol. Cuando más gris se avistaba el futuro de Ancelotti, dos de los olvidados por el italiano salieron a su rescate. Güler y sobre todo, Endrick fueron los protagonistas de la prórroga. Nada más comenzar la segunda parte del tiempo extra, un zurdazo del brasileño tras asistencia del turco permitió respirar al Santiago Bernabéu. El disparo del ex del Palmeiras puso por delante al Madrid y dio aire a Ancelotti. Ya con el partido otra vez de cara, Valverde volvió a dejar su marca personal con el gol de la noche. El broche lo puso de nuevo Endrick con un taconazo.
Final feliz en una noche agónica en el Santiago Bernabéu. Aún así, el equipo blanco ya espera rival en los cuartos de final. Antes, los de Ancelotti volverán el próximo domingo al Santiago Bernabéu para enfrentarse a la UD Las Palmas.