Un gol de Endrick en la primera mitad pone en ventaja a un Real Madrid que ya sueña con la Cartuja. El grab trabajo defensivo de una línea totalmente nueva y una gran actuación de Lunin mantuvieron con vida a un Real Madrid que supo sufrir durante varios tramos del partido. En ataque, Endrick autor del gol y Bellingham, asistente de lujo, los mejores del equipo de Ancelotti.
Hasta ocho cambios realizó Ancelotti respecto al último partido liguero ante el Girona. Con la Champions y el encuentro ante el Betis a la vuelta de la esquina, el italiano priorizó ambas y dio descanso a varios de los titulares en San Sebastián. Asencio fue la opción final en el lateral y Tchouameni volvió a ser central. En el medio, Camavinga acompañó a Ceballos, mientras que Endrick y Güler fueron las novedades en el ataque. Ambos, acompañando a Vinicius. El brasileño, titular de nuevo, estrenó capitanía.
La Copa de Endrick
El brasileño se ha propuesto ser el hombre de esta Copa del Rey. Lo hizo ante el Celta, lo hizo en Butarque y lo ha vuelto a hacer en San Sebastián. La primera que tuvo, para adentro.
Después de un inicio relativamente calmado, el equipo blanco se limitó a esperar los primeros arreones propios de un equipo que está ante una magnífica oportunidad de volver a hacer historia. Los blancos, con un planteamiento algo más defensivo, aguantaron los primeros intentos de la Real. Kubo y Brais, los más peligrosos de los donostiarras. Sin embargo, la pegada blanca volvió a marcar el encuentro. Esta vez gracias a una genialidad de Bellingham.
El británico armó un contrataque perfecto y Endrick puso tierra de por medio. Un balón en largo medido del inglés dejó sólo ante Remiro al brasileño, que con un sutil toque de exterior batió al portero de la Real. 0-1 y eliminatoria encarrilada.
El resto de la primera mitad continuó con un guión similar. Un Madrid replegado atrás que intentó aprovechar para matar el partido. Sin embargo, una gran estirada de Remiro evitó el tanto de Vinicius. Por parte de la Real, tanto Brais como Oyarzabal fueron los que más peligro generaron, no obstante, Lunin apareció con varias intervenciones de mérito para sostener al equipo antes del descanso.
Como si nada hubiese cambiado tras el paso por vestuarios. Con la única novedad de la entrada de Lucas Vázquez por Asencio, el Madrid siguió con su idea de aumentar la distancia. Endrick, volvió a ser el gran peligro del ataque blanco. Esta vez, con un remate al larguero cuando ya cantaba el 0-2 en el marcador. Sin embargo, ese balón se estrelló en la madera en la oportunidad más clara del segundo tiempo. Mientras, en la Real, Kubo siguió intentándolo aunque sin eficacia.
Con el paso de los minutos y sobre todo, los cambios, el equipo fue controlando más el encuentro, sintiéndose más y más cómodo con el paso de los minutos, incluso rozando el 0-2 gracias a un disparo de Bellingham que fue repelido por Remiro en lo que fue la mejor parada del partido.
Ya en los minutos finales y a pesar de las varias intentonas, sobre todo del Real Madrid por ampliar el marcador, no se movería. La peor noticia, el golpe que sufrió Ceballos en la recta final que dejó al equipo con 10. El andaluz acabó antes de tiempo y con signos de mucho dolor.
Victoria de mucho oficio de un Real Madrid que destacó por su gran trabajo defensivo durante todo el encuentro. Eso, y la pegada, dejan la eliminatoria muy encarrilada. Lo próximo, el Betis en Liga y el Atlético en la Champions.
