Cuantas veces habremos oído esta misma frase durante tantos años. «El Real Madrid comienza su andadura en la Champions en una temporada en la que buscará revalidar su corona de campeón». Concretamente a lo largo de la historia se ha escuchado catorce veces. Hoy, será la decimoquinta vez que se vuelve a esta situación. El Real Madrid debuta en la mejor competición del mundo a nivel de clubes y lo hará de nuevo, como el último campeón. El rey de Europa vuelve a jugar un partido de Liga de Campeones 108 días después. El último, la noche mágica de Wembley en la que el Real Madrid volvió a conquistar Europa consiguiendo la decimoquinta.
El Stuttgart será el primer rival del Real Madrid en esta renovada edición de la Champions. Un formato con variaciones notables respecto a lo que hemos conocido durante las últimas décadas. El equipo alemán será el primero de los cuatro que recibirá el Real Madrid en el Santiago Bernabeu.
El Real Madrid no llega en el momento soñado por el club ni el madridismo. Un inicio dubitativo sobre todo en el juego hace que este equipo genere dudas en este inicio de temporada, aunque es cierto que va de menos a más. Pero esto es la Champions y aquí el equipo se crece. La noticia positiva para este encuentro es la vuelta a la convocatoria de Jude Bellingham y Tchouameni. Ambos se perdieron el encuentro ante la Real Sociedad, más por prevención que por lesión, y ya el mismo Ancelotti dejo entrever que ambos estarían para el duelo de hoy y así será. «Vuelven dos jugadores importantes, aunque tenemos la mala suerte de haber perdido a Brahim. Pero el equipo está bastante bien para ganar mañana, empezar esta nueva competición de la mejor manera. Con una victoria». Así se refería Carlo en la previa a los regresos de Tchouameni y Bellingham. Quien también estará seguro será Militao. El brasileño no se entrenó ayer por un golpe pero el propio Ancelotti confirmó que será titular.
El partido tiene muchos alicientes, no solo por ver si el juego del Real Madrid sigue ese proceso de mejora, si no por supuesto, por el debut en Liga de Campeones de Kylian Mbappé. El francés ya sabe lo que es marcar en Europa con el Real Madrid (Supercopa), en el Santiago Bernabeu y como visitante. Sin embargo, le falta estrenarse en el mejor escenario posible, la Champions. El galo llega en su mejor momento, con una forma física que recuerda ya al mejor Kylian y además, viene de completar su mejor encuentro como madridista. Un partido que además culminó con un gol. La única noticia negativa, las bajas. Alaba, Camavinga, Ceballos y Brahim se perderán el partido.
Un rival sin nada que perder
En frente estará el Stuttgart. El equipo dirigido por Sebastian Hoeness, al que bien conoce Ancelotti, regresa a la Champions 14 temporadas después. El conjunto alemán completó la pasada campaña una de sus mejores a nivel de registros de toda su historia. Subcampeón de la Bundesliga por delante del Bayern de Munich. Fue una de las revelaciones de la temporada en Alemania, solamente por detrás del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. El equipo dirigido por Hoeness pasó en dos temporadas de disputar el playoff de permanencia a la Champions. Por ello no tendrá ninguna presión y querrán utilizar este escenario que se les presenta para dar un golpe encima de la mesa.
En lo deportivo, aunque es cierto que no han comenzado de la manera esperada (décimos en la clasificación), llegan tras conseguir la primera victoria de la temporada al vencer por 1-3 al Borussia Mönchengladbach con un doblete de su jugador referencia, Ermedin Demirovic. El bosnio es uno de los grandes peligros junto con Undav, firmado este verano desde el Brighton, al que Hoeness le dio los galones como hombre de referencia en la punta de ataque. Un equipo muy ofensivo al que se enfrentará el Real Madrid en un duelo sin precedentes.