Jude Bellingham fue el mejor jugador del Real Madrid ayer frente al Athletic Club. Pese a la derrota blanca en San Mamés (2-1), el inglés mostró personalidad y no se escondió en un escenario de tal magnitud, a diferencia de muchos otros de sus compañeros. Jude fue uno de los pocos jugadores madridistas que crearon peligro y amenazaron la meta de Agirrezabala, e incluso logró el premio del gol. Bellingham anotó el 1-1 en el minuto 78 para igualar el encuentro y aumentar las esperanzas blancas de conseguir los tres puntos en ‘La Catedral’. Su empeño y su gol no sirvieron para nada puesto que los de Ancelotti acabaron naufragando apenas dos minutos después encajando el definitivo 2-1.
Cuarto partido de Liga consecutivo anotando
Jude Bellingham está consiguiendo paulatinamente recuperar su mejor versión. Partido tras partido el centrocampista ha ido mejorando y lo que es más importante, ha logrado reconciliarse con el gol. El británico, que no había sido capaz de anotar gol en los primeros 16 partidos de la temporada, por fin destapó el tarro de las esencias el pasado 9 de noviembre ante Osasuna.
‘La teoría del bote de kétchup’: «Los goles son como el kétchup, a veces no salen por mucho que lo intentes y luego vienen todos de golpe». Esa célebre frase la pronunció Ruud Van Nistelrooy, cuando Higuain pasó un mala racha goleadora en el conjunto blanco. Ahora esta teoría a la que el delantero holandés hizo referencia, se ha plasmado con Jude Bellingham.
Una vez que el primer gol cayó, el resto han venido uno tras otro. El gol que abrió la veda fue en el encuentro de la jornada 13 de Liga frente a Osasuna en el Bernabéu. En el minuto 42, Jude recibió un gran pase largo de Asencio para definir con calidad por encima de Sergio Herrera. Al volver del parón internacional, el inglés continuó con la racha. Bellingham anotó el 0-3 en Butarque para cerrar la goleada blanca contra el Leganés.
El pasado domingo frente al Getafe volvió a «mojar». Jude abrió la lata ante los azulones desde el punto de penalti. Bellingham tomó la responsabilidad desde los once metros y batió a David Soria con maestría. Paradinha y disparo al centro. Además el ‘5’ del Madrid dio la asistencia de gol en el 2-0 merengue anotado por Mbappé.
El último gol de la gran racha que Bellingham está atravesando se produjo ayer en San Mamés. Con 1-0 en el marcador, Mbappé realizó un potente disparo desde fuera del área que Agirrezabala detuvo dejando un rechace que Jude aprovechó. El inglés, con su pierna izquierda, empujó el balón a la red para poner las tablas en el marcador. 4 goles en los últimos cuatro partidos de Liga.
Una dinámica que contrasta con la del equipo
Bellingham se está reencontrando con el Jude del año pasado, tanto en cifras como en sensaciones; sin embargo este buen nivel del inglés choca con la paupérrimo estado de forma colectivo del Real Madrid. Los blancos no ven la luz al final del túnel y muestran irregularidad partido sí, partido también. Ancelotti sabe del esfuerzo y compromiso del centrocampista y agradeció su trabajo tras el partido en Bilbao. El británico ganó 11 de los 15 duelos que tuvo en el suelo y 1 de los 3 aéreos. También realizó 4 entradas, 2 intercepciones, 1 despeje y 1 tiro bloqueado.
Pese a realizar un buen partido a nivel individual, Bellingham se marchó de San Mamés frustrado por el resultado y la actuación del equipo; no obstante el mediocampista de 21 años confía en sus compañeros para revertir la situación. El momento blanco no es el mejor y tanto Bellingham como el resto de jugadores que componen la plantilla tienen que remar en la misma dirección para darle la vuelta a una situación compleja.