Mario Gila (Santa Perpetua de Mogoda, 2000) afronta su tercera temporada en la Lazio. El barcelonés, que llegó a las categorías inferiores del Real Madrid en 2018 procedente de la cantera del Espanyol, abandonó la disciplina blanca en el verano de 2022 para seguir creciendo como jugador. El Real Madrid se reserva el 50 % de sus derechos y por tanto el club podría obtener una buena plusvalía por una futura venta del central que, incluso, también gusta como posible refuerzo para la zaga del equipo de Carlo Ancelotti.
El rendimiento de Gila en el club de la capital italiana ha ido de menos a más, hasta el punto de asentarse como un fijo en el eje de la zaga. Con 19 partidos a sus espaldas este curso, el exmadridista se ha convertido en un pilar fundamental para Marco Baroni, técnico de ‘Las Águilas’.
El salto del Castilla a la Serie A
Gila pasó rápidamente del Juvenil A del Real Madrid al primer filial merengue, el Real Madrid Castilla. Desde el primer momento que se enfundó la camiseta blanca se asentó en el centro de la zaga y con su carácter y liderazgo dirigió la defensa castillista. En sus tres temporadas a los mandos de Raúl González disputó 73 partidos sumando cinco goles y tres asistencias. Su explosión llegó precisamente en la última, en la 2021/2022. En dicho curso Gila multiplicó sus minutos jugados en el filial e incluso llegó a lograr el premio de debutar en partido oficial con el primer equipo. El canterano disputó los últimos 15 minutos del Real Madrid – Espanyol, partido que selló el 35º título de Liga en la historia del Real Madrid.
Ante la falta de oportunidades en el primer equipo, Gila decidió emprender un nuevo viaje y probar suerte en una liga extranjera. La Lazio era su destino, un club histórico de Italia con grandes exigencias. Al español le costó mucho al principio y parecía no dar con la tecla para empezar a contar con minutos en el conjunto romano. En una reciente entrevista para Relevo se sinceró y habló de como gestionó contar en su primera temporada con tan sólo 765 minutos en 12 partidos. «Venía con muchas expectativas. Venía de Disneyland porque estaba en el Madrid y ahí todo es de color de rosas, y parece que vayas a jugar siempre y estás equivocado. En la pretemporada lo hice bien y estaba de tercer central, pero cometí errores por falta de madurez. Tal vez porque no estaba preparado al 100% tuve partidos no muy buenos, y el míster decidió sentarme y no darme confianza. Seguí trabajando, pero tuve momentos muy duros. Estuve muy jodido y tuve que buscar ayuda psicológica fuera del club. Fue un proceso. Fui tirando hasta que poco a poco lo llevé mejor, fui paciente y pensé que mi momento podía llegar«, explicó el defensa barcelonés.
Interés de otros clubes italianos
El buen hacer de Gila en la Lazio esta temporada está llamando la atención de grande clubes, sobre todo italianos. Dos de los equipos más laureados del país quieren hacerse con sus servicios próximamente. Hace unos días, Il Corriere della Sera desveló que el Inter tiene sus ojos puestos en el central catalán y, recientemente, el portal Milanlive.it ha revelado que el AC Milan también se ha interesado por el fichaje del ex madridista.
Las puertas están cerradas para una posible venta en el mercado invernal; sin embargo la Lazio podría reconsiderarlo en verano. Sea como fuere, el Real Madrid se mantiene muy atento a la situación de su canterano, ya sea para repescarlo y contar con él para la defensa blanca de la campaña 2025/2026 o ingresar la mitad de un futuro traspaso a otro club.
